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El Centro de Estudio para la Democracia (CESPAD), presenta su noveno informe de seguimiento al progreso de la Agenda Anticorrupción impulsada desde el Congreso Nacional. El objetivo de estos documentos periódicos es examinar de cerca los pasos que se están dando, tanto positivos como negativos, en el combate a la corrupción a nivel nacional desde este Poder de Estado.
La Agenda Anticorrupción fue creada en el año 2022 por la Comisión Anticorrupción del Congreso Nacional, y consiste en un conjunto de medidas que buscan enfrentar la corrupción en el país de manera integral. Uno de los objetivos clave de esta agenda es desmantelar el entramado legal e institucional que propició la impunidad y el abuso de poder durante la dictadura del Partido Nacional.
Específicamente, el CESPAD monitorea las acciones y las decisiones adoptadas por los diputados del Congreso Nacional en torno a las leyes y reformas legales orientadas aenfrentar las redes de corrupción y la corrupción misma, como un flagelo social que se instaló con fuerza durante los últimos doce años de gobiernos nacionalistas.
Este noveno informe analiza y reflexiona sobre los hechos noticiosos suscitados en el período comprendido entre el 1 y el 31 de agosto de 2023, y se enfoca en el contexto del trabajo realizado por la comisión técnica de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para negociar la instalación de la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH); la derogación del decreto 116-2019, que quitaba al Ministerio Público la potestad de investigar el desvío de fondos públicos; los decretos denominados “pactos de impunidad” pendientes de derogarse por el Congreso Nacional, y la aprobación pendiente de la Ley de Colaboración Eficaz. También, el entramado en el que se encuentra la elección del fiscal general y fiscal adjunto del Ministerio Público, un proceso matizado por los intereses político- partidarios.
El CESPAD pone a disposición el presente informe con el propósito de contribuir a la generación del debate informado y, en especial, a motivar los esfuerzos que deben surgir desde la sociedad misma, a favor de la lucha contra la corrupción y a la apertura de nuevas y mejores sendas que fortalezcan la democracia en Honduras.