Escrito por: René Estrada
Por primera vez en Honduras, la autopostulación es la única manera para ser electo como candidato o candidata a las altas magistraturas de la Corte Suprema de Justicia (CSJ). Es decir, solo las personas que cumplan los requisitos y que se autopropongan, se tomarán en consideración para participar en el proceso.
La Ley Orgánica de la Junta Nominadora (Decreto 140-2001), que fue el marco legal para la selección de magistrados en los últimos procesos de elección de la CSJ (2001-2002, 2008-2009 y 2014-2015), establecía en el artículo 18, “que cada uno de los siete sectores integrantes de la JN debían proponer 20 candidatos a magistrados y magistradas”.
En la actualidad, el Decreto 74-2022, que crea la Ley Especial de Organización y Funcionamiento de Junta Nominadora para la Proposición de Candidatos a Magistrados de la CSJ, establece en el artículo 14 que las siete instituciones y organizaciones que integran la Junta Nominadora no podrán presentar postulantes: el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh), la sociedad civil, el Colegio de Abogados de Honduras (CAH), el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), las centrales obreras, las universidades y la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Esta reforma se considera una de las más significativas debido a que en procesos anteriores, uno de los fuertes cuestionamientos era, precisamente, que mediante la facultad que la ley le daba a las instituciones y organizaciones que conforman la Junta Nominadora, se manipulaba la preselección.
Un avance significativo
Para los abogados y analistas que siguen de cerca el proceso de selección de la nueva Corte Suprema en Honduras, las autopostulaciones son un avance significativo ya que, como sugiere Raúl Pineda, “la postulación por parte de sectores que integraban la Junta, representaba fundamentalmente los intereses y las naturales inclinaciones y simpatías de los grupos de empresarios, trabajadores, entre otros, que normalmente postulaban a sus abogados o a aquellos afines a sus intereses para integrar la nueva Corte, generando así, un proceso de exclusión”.
Entonces, limitar el proceso de elección de la CSJ a las autopostulaciones debe apelar, según el entrevistado, a un órgano superior de justicia independiente, incluyente y, sobre todo, transparente.
Una Junta Nominadora a la espera
En medio de los importantes avances, para Pineda, el problema fundamental que se presenta ahora en el proceso “es que la Junta Nominadora se excedió con el número de documentos que se requieren para autopostularse. Son prácticamente 31 documentos que no son fáciles de obtener”.
Según la convocatoria de la Junta Nominadora, la que se publicó el 13 de octubre, quienes se postulen deben cumplir con 16 constancias institucionales, entre otros documentos, que deben obtenerse en instituciones como la Superintendencia de Alianza Público Privada (SAPP), la Oficina Normativa de Contratación y Adquisiciones del Estado (ONCAE), el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras (CONADEH), entre otros.
Esta situación representa un obstáculo para las postulaciones de abogados y abogadas que no residen en Tegucigalpa debido a que, como acota Pineda, “no cualquiera tiene la disponibilidad de tiempo para estar, al menos, una semana obteniendo esa cantidad de documentos que no son requisitos establecidos en la ley, y que perfectamente la JN pudo hacer la investigación por iniciativa propia. Esa cantidad de documentos requieren gasto y una enorme paciencia, dada la natural lentitud con que las autoridades emiten constancias o certificados”.
El presidente de la Junta Nominadora, Mario Urquía, considera que es cuestión de tiempo para que las y los abogados interesados comiencen a postular. “Nosotros creemos que a partir de la próxima semana ya va a haber un movimiento importante. Es más, ya hemos estado monitoreando en algunas instancias, por ejemplo, el Tribunal de Honor, donde ya han ido a retirar la debida constancia para este proceso más de 50 profesionales del derecho”, afirmó.
Hasta el 26 de octubre se reportaban diecisiete (17) autopostulaciones. Los integrantes de la JN tienen confianza en que la cantidad de participantes incrementará; citan como precedente lo acontecido en el último proceso de elección de la CSJ, en el que 83 de los 200 candidatos y candidatas fueron auto propuestos, datos publicados en el Portal de Transparencia de la JN para el año 2015. Es importante recalcar que de las 83 autopostulaciones, solo 24 fueron mujeres.
Un proceso en el marco de los estándares internacionales
El actual proceso de selección de la nueva Corte Suprema ha generado muchas expectativas. Con la eliminación de la facultad de la Junta Nominadora para las postulaciones, se espera una mayor independencia en el proceso y la garantía de que las personas candidatas se seleccionen con base en lo que establecen los estándares internacionales.
La ciudadanía hondureña está vigilante de que este proceso se rija por los estándares internacionales que demandan una elección con base en méritos y capacidades; transparencia y publicidad; igualdad y no discriminación, y la participación de la ciudadanía en todo el proceso.
- La selección de las y los mejores profesionales del derecho
Una de las exigencias que la JN tiene con la nueva normativa es la selección de los mejores candidatos para que, la nómina de no menos de 45 aspirantes que se presentará ante el Congreso Nacional (en enero del 2023), esté conformada por las y los mejores juristas.
Para cumplir con una selección basada en calidad, será necesario un alto índice de participación, ya que como menciona Urquía, “en la medida que se postulen quienes tengan las mejores credenciales, las mejores trayectorias, los mayores compromisos con la sociedad hondureña, se va a permitir que la calidad del proceso de selección sea mejor y que, finalmente, la selección que se haga de al menos 45, sea también la más idónea”.
- Un proceso con amplio escrutinio social
Otra de las aspiraciones en este nuevo contexto, es que se fomente la participación ciudadana, en especial por medio de las veedurías, con la intención de garantizar un proceso transparente y con base en ley, porque de la correcta selección que haga la JN depende el futuro del máximo órgano de justicia.
Por ende, es obligatorio que la información solicitada a los postulantes esté disponible en el Portal de Transparencia, al igual que los resultados de las pruebas y las valoraciones que realice la JN.
Un cambio con muchas implicaciones
La modificación que se hizo en la ley, sobre el proceso de postulaciones, permea la posibilidad de impulsar cambios en el sistema judicial del país. Que las autopostulaciones sean de manera independiente, allana el camino hacia la tan esperada autonomía de este poder del Estado.
Sin embargo, sin la participación de las y los mejores abogados del país, el involucramiento ciudadano y el interés de la Junta Nominadora por una CSJ independiente, los avances serán mínimos.